martes, 5 de abril de 2016

¿SABES QUÉ ES UN VINO BRISADO?



 VINOS “BRISADOS”

Publicado en Elsumiller.com Abril 2016

                Existe un tipo de vinos blancos que se salen de lo convencional al haber sufrido una  fermentación usualmente destinada a los vinos tintos: el mosto fermenta en el depósito, en la tinaja o en la barrica, en presencia de los hollejos. Esto hace que el vino así obtenido sufra una serie de transformaciones organolépticas que le imprimen un carácter muy peculiar. Son los tradicionalmente llamados “vinos brisados” o más modernamente “vinos naranjas” (no confundir con los vinos de naranja del Condado de Huelva).
                En España existen zonas donde hasta finales del siglo XIX era habitual elaborar vinos brisados. Destacaremos en Madrid la zona de San Martín de Valdeiglesias, donde la casta Albillo era la protagonista, y la tarraconense comarca de la Terra Alta, donde todavía se elaboran, casi todos a partir de la Garnacha Blanca.


                En un antiguo tratado de viticultura conservado en los fondos de la biblioteca del MAGRAMA (Ministerio de Agricultura, alimentación y Medio Ambiente), se distingue claramente a la hora de vinificar, entre el vino blanco “virgen”, elaborado sin presencia del hollejo y el vino blanco brisado, atribuyéndole a este último propiedades aromáticas y sápidas de mucha menor calidad que el primero. Se recomendaba en el caso de vinificar “en tinto”, que la vendimia fuera temprana para conservar algo de acidez y que el contacto con la piel se limitase a unos pocos días, realizando el resto de la fermentación “en blanco” para evitar suciedades y sensaciones desagradables.


              
  Volviendo a la actualidad, podemos encontrar vinos brisados amparados por la D.O.  Terra Alta, de donde destacaré  el del Celler Bárbara Forés, o el de Orto Vins, de la vecina D.O. Montsant. Ya fuera de esta zona hay una serie de elaboradores que apuestan por este tipo de vinos. Citaré sin desmerecer a otros al manchego Samuel Cano de bodegas Patio y a los alicantinos Rafa Bernabé con sus  Viñedos Culturales y Joan de la Casa con sus Nimi blancos. También el vallisoletano  Alfredo Maestro elabora así su blanco  Lovamor y una pareja de viticultores australianos afincados en Calatayud elaboran el Blanga en su bodega Casa de Si.


                Hay que reconocer que son vinos algo particulares que no gustan a cualquiera y tienen que estar muy bien elaborados para no dar demasiadas sensaciones de oxidación y falta de finura. A cambio derrochan personalidad, rudeza y autenticidad. Son los últimos exponentes de una cultura pasada, pero por suerte no extinguida. Piezas de nuestra historia.


1 comentarios:

sandra - Ruta del Vino de Cariñena dijo...

Muy interesante tu post, hasta el momento no he tenido oportunidad de probar estos vinos pero tras leer tu post estoy deseando hacerlo, buscaré los que recomiendas :) Gracias por compartirlo, un beso y un brindis desde Cariñena

Sandra

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