UNA AÑADA PROMETEDORA
El 28 de noviembre tuvo lugar el acto de presentación de la añada 2.011 en la nueva sede del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de Alicante. El presidente del Consejo D. Antonio Miguel Navarro presentó la terna compuesta por el bodeguero Pepe Mendoza, el Enólogo Juan Huertas y el sumiller Juan Francisco Gallego, e hizo patente en cifras, fechas y productos lo que este año vinícola ha dado de sí y las expectativas actuales, tanto a nivel de cifras de mercado como de la calidad de los vinos que ahora duermen en sus bodegas.
En cuanto a fechas y cifras, Navarro concretó como día de comienzo de la vendimia el 4 de agosto, concretamente en Novelda y como fin de campaña el 24 de octubre. Cambios climáticos aparte, estas fechas refuerzan el marcado carácter mediterráneo y la pronta maduración de la uva que caracteriza a esta D.O.
Un dato llamativo, que en mi opinión refleja el concepto gregario del vino alicantino, es que de los 33.958.304 kilogramos de uva que se vendimiaron en esta campaña, un 91% fue a parar a cooperativas, mientras que sólo el 8% de esta uva se vinificará en bodegas particulares. Esta proporción -reitero que se trata de una opinión estrictamente personal- debería tender a invertirse siguiendo el ejemplo de otras denominaciones de origen, que basan su renombre y prestigio en el vino “personalizado” de las bodegas, en contrapunto a los vinos cooperativistas, donde la cantidad, salvo honrosas excepciones, suele primar por encima de la calidad.
Como dato económico positivo, se destacó que la producción de uva bajó un 20,95% con respecto a la añada anterior, lo que se traduce en una subida del precio y supone un acicate que fomente el cuidado del viñedo y con ello el aumento de la calidad de la uva.
Pepe Mendoza resaltó que en cuanto a viticultura, el año se desarrolló sin contratiempos climatológicos, siendo muy cómodo hasta mediados de agosto, ya que no hizo excesivo calor y se posibilitó una maduración progresiva. A finales de Agosto, con el calor tardío, hubo que acelerar algo la vendimia para no perder la acidez, tan preciada y escasa por estos lares.
Juan Huertas hizo patente el aumento de temperaturas que se viene sufriendo en estas últimas décadas, poniéndolo de manifiesto mediante un hecho rotundo: La fecha del fin de vendimia en las parcelas que él controla este año, se corresponde con la de inicio de las campañas de hace 30 años.
Acto seguido y ante una treintena de invitados que representaban los sectores de producción, comercialización y comunicación social, se pasó a la cata de vinos en “premier”, seleccionando una serie de vinos genéricos que incluyó un total de 7 elaboraciones, obtenidas a partir de 5 variedades cultivadas en las distintas subzonas de la D.O.
Juan Gallego condujo la cata, donde en blancos se presentó un chardonay y un moscatel seco. Se prosiguió con un rosado de monastrell y en cuanto a tintos, se cató una shirah, una garnacha tintorera y una monastrell. La cata concluyó con un vino de licor de moscatel de la Marina.
Tras el acto, los asistentes tuvieron la ocasión de visitar y conocer de primera mano el flamante edificio que alberga al Consejo. Sin duda, tanto por lo funcional de su diseño como por su ubicación, se convertirá en una poderosa herramienta para dar a conocer y representar dignamente tanto a los vinos de Alicante, como a las personas que dedican su esfuerzo a situarlos en el lugar que les corresponde dentro del panorama vinícola internacional.
La jornada finalizó, como no podía ser de otra manera, tomando una copa de vino. Se dispuso una barra de vinos con una nutrida representación de bodegas acogidas. Además de conocer de primera mano la alta calidad que presentan, éstos dieron pie a debatir de forma distendida sobre la importancia de este acto, que sin duda se debe repetir año tras año, con el fin de que la sociedad alicantina pueda tomar el pulso a sus vinos y conocer el esfuerzo que se esconde detrás de cada botella.
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